14 de agosto
Tantas veces debajo de la muralla de Tendeñera y nunca me había subido a ella. La sierra de Tendeñera es una preciosa muralla calcárea que une perpendicularmente los valles de Tena y Ara a la altura de Hoz de Jaca y Bujaruelo respectivamente. El cordal está dominado por el pico Tendeñera (2.847 m) en su extremo este y la peña Sabocos (2.755 m) en el oeste. La cresta que une ambas cimas es larga, enrevesada y presenta algunas dificultades, sin embargo entre Sabocos y el extremo este del cordal (Peña Blanca) el recorrido es aéreo en un tramo pero está exento de dificultades y es tremendamente estético.
Saliendo del pueblo de Panticosa, se trata de alcanzar el ibón de los asnos en la parte alta de la estación. Para ello se pueden usar las pistas de esquí o subir por el bosque por sendero o por pista. Una vez en el ibón, una pista lo rodea por su izquierda, seguirla hasta localizar hitos que indican la subida normal a Sabocos. El sendero asciende rapidamente hasta que en una pedrera nos cruzamos con marcas de GR, seguirlas hacia la derecha, primero sin ganar altura y luego ascender por pedrera hasta el portillo Chetro. Muy bonito. A la derecha, Peña Roya y Peña Blanca. Después de ascenderlos volver sobre nuestros pasos y continuar la preciosa cresta hasta la Peña Sabocos. Descenso por la normal. Para alargar la jornada y poder correr un rato vuelvo por el precioso valle de la Ripera. Se trata de volver a coger la GR citada anteriormente cuando el sendero se cruza con ella y seguirla en dirección contraria que antes hasta el collado que cambia a la vertiente de la Ripera. De aquí por sendero, pista y luego sendero se vuelve al pueblo.
Me encantó la vuelta. Tiene tramos de andar y ganar rápido desnivel al principio, un tramito más alpino en la cresta y un retorno corriendo para estirar las patas. Para mí, la combinación perfecta, una pequeña joya.
Telera
Hacia el portillo Chetro
Al fondo Sabocos
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