Lyngen

 

Del 6 al 10 de abril.

Después de nuestra toma de contacto en Tromsø, llegó el momento de trasladarnos a la península de Lyngen, el auténtico tesoro para la práctica del esquí de montaña.

Los Alpes de Lyngen se encuentran en un península al Este de la ciudad de Tromsø. La península mide unos 90 km de norte a sur y 15-20 de este a oeste. El fiordo de Lyngen al este y el Ulsfsjorden al oeste la delimitan. El carácter alpino de sus montañas junto con su localización geográfica contribuyen a crear un lugar tremendamente estético para todos los amantes de las montañas y los lugares salvajes. Su máxima altura ronda los 1.800 metros pero abundan las cimas de 1.000-1500 metros.

Nosotros nos alojamos en una agradable casa situada en una peninsulita en el extremo oeste. No lejos de Svensby. Para llegar allí desde Tromsø en coche deberemos dirigirnos dirección Este durante 30-40 minutos hasta Breivikeidet desde donde un ferry en unos 10-15 minutos nos depositará en Svensby.

Esquiamos tres días en este auténtico paraíso.

  • Día 1, Steinfjellet. La montaña es preciosa y la meteo (nublado y en ocasiones poca visibilidad) le da un ambiente brutal. El inicio es por un bosque denso de abedul y luego el itinerario tiende a la derecha. Gracias a Pedro, que traza con maestría, alcanzamos la espectacular y acornisada cima. El cielo se abre al llegar y nos regala un momento mágico. Primeros metros de descenso con poca visibilidad y luego nieve polvo hasta el bosque y desde allí nieve más pesada. Un gran día.
  • Día 2, Storgalten. Un clásico del esquí de montaña en Lyngen. Situada en el extremo norte de la península, la montaña es fantástica, como diseñada para esquiar, muy directa desde el coche. La orientación W-NW contribuye al frío intenso durante la subida. En la cima el sol nos calienta y nos preparamos para un descenso cinco estrellas. Estrenamos la enorme pala llena de nieve fría y seca. Un descenso para recordar en un lugar que nos deja un gran sabor de boca.
  • Día 3, Store Jaegervasstinden. La guinda del pastel se merece un post aparte...
Alrededores de nuestra casita
Steinfjellet
Cerca de la cima
Diazo en el Storgalten
Pedrini
Llegamos felices al coche



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