Arista NE Ezkaurre & SE Palas

 Recupero estas dos actividades de montañas libres realizadas en 2010 y 2011.

EZKAURRE, ARISTA NE. 19 de septiembre de 2010.

Después de rascar el hielo del coche por la mañana en Uztarroz, partimos hacia el collado de Argibiela, punto de partida para ascender el Ezkaurre (2.047 m). Esta hermosa montaña, que separa el valle de Roncal y el de Ansó, es una de las más emblemáticas de la zona. Por fortuna el frío amanecer da paso a un bellísimo día soleado en el que acabamos pasando calor. La arista, magnífica. Se trata de una escalada muy asequible en un gran entorno. La primera parte es una trepada hasta llegar a las célebres placas acanaladas, en las que hay algún paso de IV. Esta zona cuenta con parabolts y reuniones equipadas. Más adelante la cosa se tumba, se pasa por unos preciosos "pasadizos" y se llega a un rapel que nos deposita en una brecha. Desde aquí podemos subir al gran gendarme sin grandes dificultades y luego descender unos 100 m hasta un collado o desviarnos hacia la derecha separándonos del filo y acabar saliendo al mismo collado. Ya solo queda una fácil trepada, alternada con tramos herbosos hasta llegar a la cima. Descenso por la normal.

Actividad asequible, segura y muy disfrutona. Imprescindible cerveza/s en el camping de Zuriza y baño en la poza.

PALAS, ARISTA SE. 5 de julio de 2011.

El Palas es una de las montañas más bonitas que conozco. Recuerdo la primera vez que lo ascendí: Estábamos en pleno julio del año 2000 y teníamos todo el pirineo por descubrir. Me acompañaban Cristina y Angós, el día anterior habíamos subido el Midi d´ossau y el día siguiente hicimos lo propio en el Balaitús. ¡Grandes jornadas de descubrimiento!! En el año 2005 volví a esta montaña. En esta ocasión me acompañaba Patxi y escalamos la Arista SO o del pitón Von Martin como antesala de la arista Lamathe al Balaitús que escalaríamos al día siguiente. ¡¡Uff!! ¡Me canso sólo de escribirlo!
Esta vez me acompaña Laura y escalamos la magnífica arista SE. Las principales dificultades de la primera mitad de la arista se salvan por la cara Sur y no superan el III grado. En la escalada del gendarme hay pasos de III+ ¡siempre que no te embarques! Y de aquí a la cima se va buscando lo más fácil sin superar el III grado. Nosotros subimos de tirón desde La Sarra y la verdad se nos hizo bastante largo, sobre todo del gendarme a cima ya que aunque la dificultad es asequible es un terreno muy expuesto y aseguramos todos los tramos.
Llegamos a La Sarra cansados pero felices, nos damos un baño memorable en el río, y rematamos la faena con una buena jarra de cerveza en el bar de La Sarra y corriendo para casa que al día siguiente es el txupinazo… ¡pero eso ya es otra historia!