12 de agosto con Larss.
Las localidades de Vallorcine y Barberine, a tan solo unos minutos de la bulliciosa Chamonix, permiten disfrutar de la escalada en un entorno tranquilo. La "Cacao girls" la tenía pendiente desde que en mayo estuvimos por allí escalando la "Autoroute blanche", así que la excusa era perfecta para pasar una agradable jornada alejados de teleféricos y turistas.
A Larss le apetece también así que nos vamos para allí. Pasamos la tentadora boulangerie L´Al´Pain de Argentiere a la que prometemos volver en otro momento y nos encaminamos dirección Suiza. Una vez pasado el Col de Grand Montets, dejamos atrás el desvío a Barberine y aparcamos una vez pasada la frontera, en Le Châtelard. Subimos por la pista, por encima de la vía del tren, pasamos por delante de las colmenas y cogemos el sendero en dirección a Giétroz. Unos minutos más arriba unos puntos de color naranja nos indican el pie de vía, justo encima de un bloque. No es del todo evidente, no equivocarse con el inicio de la "Autoroute blanche". No llegamos a encontrar la piedrecita con el nombre de la vía escrito.
La escalada es muy buena, todos los largos merecen la pena. Se trata de dos partes bien diferenciadas. La primera recorre el paño principal por terreno fundamentalmente tumbado. Sin embargo la escalada es variada y también hay algún tramo vertical e incluso un techito. "Escalade plaisir" perfectamente equipada. Son ocho largos que nosotros recorrimos en seis sin darnos cuenta. Existen algunas reuniones intermedias. Una vez arriba andar unos metros hasta el inicio de la segunda parte. El terreno cambia, se trata de 3 largos más físicos y algo más exigentes.
El primero es un V+ de diedro muy montañero que nos deja a los pies del largo mas difícil. En este segundo largo los cinco primeros metros son el "crux". Escalada física, hay canto pero los pies están muy muy pulidos y aceramos. Luego es más fácil. Nos saltamos una reu y se llega por terreno más fácil al pie del último largo. Una salida vertical y fina y después una laja con invertidos en la que hay que moverse hacia la derecha y luego placa tumbada hasta el final. Muy bueno.
En resumen, una vía disfrutona, rápida y que nos dejó un gran sabor de boca.
Desde la última reu en dos rápeles (el primero hasta la R12, la penúltima, y uno más de 60 m justos) se llega al pie de la segunda parte de la escalada. Desde allí senderito hasta retomar con la aproximación.
Esta vez las birras fueron en el Bar´ d Up en la popular Rue des Moulins en Chamonix.
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